Fundación Zig-Zag lanzó nueva versión de su programa de lectoescritura que incluye material de trabajo colaborativo.
Con el objetivo de mejorar las habilidades y competencias en la lectoescritura de las y los estudiantes del país, la Fundación Zig-Zag lanzó hace unos años el Programa de Articulación para la Lectoescritura (PALE) para los niveles de 1° y 2° básico. Debido a la excelente recepción y buenos resultados obtenidos, sobre todo, en colegios de sectores vulnerables, la Fundación decidió innovar el programa, incluyendo un completo set de material de trabajo colaborativo que abarca cinco áreas de aprendizaje: la conciencia fonológica, comprensión lectora, incremento de vocabulario, iniciación a la lectura, e iniciación a la escritura.
Esta nueva versión del programa PALE fue lanzada en el Colegio Dagoberto Godoy de la comuna de La Granja, instancia en la que su director, Sergio Gallardo, destacó la importancia de estas nuevas metodologías de enseñanza, sobre todo tomando en cuenta que “alrededor de un 65% de los niños en Chile no lee, y que no hay comunicación si no hay lectura”.
El objetivo general del programa es instalar en las y los docentes estrategias y prácticas pedagógicas orientadas a la enseñanza y aprendizaje de la lectoescritura de forma articulada a través del desarrollo de habilidades en la comunicación oral, la lectura, escritura y comprensión lectora, respetando el nivel de desarrollo y la diversidad en el aula, tomando como referentes las metodologías activas, el rol protagónico de las y los estudiantes y las competencias globales, éstas últimas relativas a la creatividad, la comunicación, el carácter, la colaboración, el pensamiento crítico y la ciudadanía.
La implementación del programa no sólo cuenta con la entrega del material, sino que también, con acompañamiento docente, sesión de retroalimentación, evaluación y taller de análisis de resultados, todo con la finalidad de aplicar diversas estrategias que se adecúen a las necesidades de cada uno de los alumnos, y con ello, lograr aprendizajes concretos.
Durante el lanzamiento y, como una forma de reflejar la importancia del trabajo colaborativo y lúdico a la hora de enseñar, el actor y cuentacuentos Nicolás Toro, realizó un par de actividades con el libro “Adivinemos, adivinemos”, de editorial Zig-Zag, con los docentes y colaboradores de la Fundación presentes en la actividad.
Implementación exitosa
Durante el año 2022, se implementó este programa en seis colegios de una importante red educacional de Santiago, donde se pudo verificar que, al retorno a la presencialidad luego de la pandemia, existían grandes brechas de aprendizaje, especialmente, las relacionadas con las habilidades necesarias para el desarrollo de la lectoescritura y la comprensión lectora. Debido a esto, se tomó la decisión de extender el programa a 3° básico, ya que muchos no habían desarrollado sus habilidades pre-lectoras y lectoras de forma adecuada en las clases virtuales. Pero gracias a la aplicación de constantes evaluaciones y la implementación de estrategias innovadoras y diferenciadas según el nivel de lectura de cada uno de los alumnos, se logró disminuir la brecha de estudiantes no lectores de 1° básico en un 91.8%, en 2° básico en un 95% y en el caso de los estudiantes de 3° básico en un 99,3%.
Cabe destacar que es de suma importancia para las y los docentes conocer las etapas del lenguaje, tanto las que se esperan dentro de ciertos períodos vitales, como aquellas en las que se encuentran los estudiantes, de manera de generar estrategias que permitan un desarrollo de aprendizaje armónico. “Creemos fundamental conocer las necesidades de cada estudiante, teniendo en cuenta que muchos de ellos, producto de la pandemia, se encuentran con bloqueos emocionales que repercuten en el desarrollo de las habilidades y aprendizajes durante su proceso de adquisición de la lectoescritura, haciendo de este, un momento en donde es fundamental brindarles apoyo, motivación y comprensión”, señala Mariela Flores, subdirectora ejecutiva de Fundación Zig-Zag.